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Tendencias en la industria automotriz: Manuel Montoya, director del CLAUT

Nuestra publicación hermana, Products Finishing México conversó con el director del Clúster Automotriz de Nuevo León (CLAUT) sobre las tendencias, retos y oportunidades de la industria automotriz en México.

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Manuel Montoya tiene 12 años al frente del Clúster Automotriz de Nuevo León (CLAUT), una de las agrupaciones más activas y propositivas de esta industria en México. Nuestra publicación hermana, Products Finishing México conversó con él sobre las tendencias, retos y oportunidades de la industria automotriz en México, el estado de la proveeduría nacional, así como las consecuencias que pueden tener los cambios tecnológicos para las empresas de acabados del país.

PFM: ¿Cómo evalúa el CLAUT el estado de la proveeduría nacional para la industria automotriz?

MM: La industria automotriz es la que genera más exportaciones y divisas en el país, entonces hay muchas oportunidades de negocio, pero la realidad es que tenemos muy pocos proveedores Tier 2 en México y ese es nuestro gran problema; lo que finalmente afecta a los Tier 3, como los proveedores de acabados, porque como el tratado de libre comercio anterior era laxo, se podían traer productos de otros países, hacerles cualquier procedimiento en México, y ya eran considerados mexicanos.

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Con el nuevo acuerdo comercial, las Tier 1 tienen obligación de cumplir un contenido regional, y más si son core parts, me parece que incluso tiene que ser el 100 por ciento. Este tipo de empresas no tenían ningún incentivo para desarrollar proveedores locales, pero con el nuevo tratado ya existe el incentivo y van a tener que desarrollar proveedores en México, Estados Unidos o Canadá.

PFM: ¿Cómo favorecer el desarrollo de más proveedores Tier 2 en el sector automotriz?

MM: Hay varias cosas. El incentivo negativo en la laxitud de las reglas anteriores de libre comercio hacía que las Tier 1 no desarrollaran proveedores, e inventaban pretextos para seguir comprando en sus países de origen. No se complicaban la vida, porque claro, desarrollar un proveedor local te va a costar esfuerzo y dinero; no es fácil y lleva años. Las armadoras siempre se han quejado de que en México no hay suficiente proveeduría Tier 2, cosa que es cierta, aunque sí los encuentran, la oferta debería ser mayor.

Si analizáramos a la industria automotriz como una cadena integrada, veríamos una especie de pirámide donde hasta arriba estarían las armadoras (que son unas cuantas), y luego una base amplia de Tier 1 (de unas 600 plantas, por poner un número en México), y debería haber unas 3 o 4 mil Tier 2, pero no creo que lleguemos a mil. Entonces, falta desarrollo en ese nivel y se requieren más empresarios que se animen a invertir en esta industria. Los proveedores con los que contamos (muchos ya tienen todo tipo de certificaciones y trabajan para todas las armadoras y Tier 1), son proveedores que aún podrían crecer. Las empresas Tier 2, que la mayoría son de capital mexicano, pueden recibir más negocio, y necesitamos buscar formas efectivas de lograr su desarrollo.

Un ejemplo es una empresa de inyección de plásticos, que conocimos en el año 2009 o 2010, quizá vendía unos $20 mdd y no era automotriz. Hoy vende $70 mdd y más de la mitad a la industria automotriz. Este es un ejemplo del desarrollo que se puede lograr en las empresas y que tenemos que seguir fomentando. Otra opción, que puede llevar más tiempo, es identificar compañías que quizá no están tan desarrolladas, pero conocen los procesos y les ayudamos a crecer porque también va a haber espacio para ellas. Yo creo que ahí hay una gran oportunidad para que los empresarios inviertan bien su dinero.

Un ejemplo más es el de una empresa muy conocida, Cuprum, que hacía escaleras y perfiles de ventanas, pero en el 2015 hicieron una planeación y decidieron moverse hacia productos con más valor agregado. Vieron que la industria automotriz estaba creciendo y no estaban ahí, entonces entrar al sector automotriz fue una decisión estratégica del gobierno de esta empresa. Me parece que actualmente están vendiendo $20 mdd y tienen planes para crecer a $70 mdd en los próximos tres años. Era una empresa que dominaba el proceso, pero no estaba para la industria, pero hubo dos o tres empresas que apostaron por ellos (como METALSA y Magna), y los fueron desarrollando. Hoy ya son Tier 2 en un ramo que estaba muy poco explotado en México que es el aluminio. El vehículo eléctrico y en general la industria de movilidad del futuro van a requerir de más aluminio porque tienden a ser productos cada vez más ligeros, así que hay grandes oportunidades de crecimiento para esta empresa.

PFM: ¿De qué manera afectarán a la industria automotriz nacional los cambios recientes en el acuerdo comercial de Norteamérica?

MM: Como mencioné anteriormente, las nuevas reglas de origen están obligando a que haya más contenido regional en los vehículos que se fabriquen en Norteamérica (de cualquiera de los tres países) y actualmente hay productos o partes que se importan de Asia o de Europa. Las armadoras y las Tier 1 que no cumplan con las reglas de origen, van a tener que traerse a sus proveedores a México, a Estados Unidos o a Canadá; o bien, buscar proveedores locales para suplir lo que importan de otras partes del mundo.

En este contexto puede haber una oportunidad importante para incrementar el contenido mexicano específicamente, porque muchos proveedores ya están en México y van a poder captar más negocio. Empresas japonesas, alemanas, coreanas, ya están negociando con proveedores en México para fabricar aquí las cosas que importan. Esto quizá va a obligar a que algunos Tier 2 se vengan a establecer a México, pero este tipo de empresas no son muy grandes, entonces, no es fácil que se desplacen y pongan una planta en México.  Lo que va a pasar es que va a comenzar a haber oportunidades para los proveedores locales ya establecidos y que están trabajando para otros Tier 1 y armadoras. Esto finalmente va a aterrizar en los Tier 3 —si les podemos llamar así a los proveedores de acabados superficiales—, porque muchas piezas que ya se importaban pintadas o con acabados cromados y platinados, no las van a poder traer de acuerdo con las nuevas reglas y las tendrán que desarrollar en México con toda la cadena, incluido el acabado o el tratamiento térmico que sea requerido. Creo que va a haber una gran oportunidad de desarrollo y en el clúster lo comenzamos a notar porque algunas empresas trasnacionales nos están solicitado presentarlas con proveedores nacionales.

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