Privarsa amplía su cobertura de la zona noroeste y anuncia nuevos planes en Querétaro

Privarsa inició operaciones en Monterrey hace casi 30 años y de ahí fue expandiéndose hacia el centro del país, donde ha llegado a tener una cobertura de 10 oficinas en el centro del país y una en Estados Unidos, en Texas. “Realmente nos faltaba cobertura en la parte noroeste (hablamos de los estados de Chihuahua, Sonora y Baja California). Con esto en mente, iniciamos en 2013 un emprendimiento con mi socio de entonces, Carlos Chávez. Nos dimos cuenta de que  las compañías de esta zona se quejaban porque compraban todo en Estados Unidos, pero realmente nadie cruzaba la frontera a darles servicio técnico o atención. De ahí nos surgió la idea de emprender”, comentó el Ing. Pablo Vargas, director general de Privarsa.

Así, crearon un concepto de empresa binacional, con una compañía que atendía a los clientes de Tijuana, Mexicali, Hermosillo, Nogales, Ciudad Juárez y Chihuahua, para que mantuvieran los beneficios de compra en Estados Unidos, si así lo requerían, pero con el soporte local. De esta manera, crearon dos empresas: C&V Technoplast, con sede en San Diego, y Technoplast México, con sede en Tijuana.

Tras sortear los retos del arranque, luego de años de crecimiento, entre 2019 y 2020 se presentaron cambios del mercado y de las perspectivas de negocio, que llevaron a la disolución de la sociedad, tras lo cual Privarsa adquirió la totalidad de C&V Technoplast y Technoplast México, que consta de 3 oficinas en la parte de México, en Tijuana Hermosillo y en Ciudad Juárez, y dos oficinas en Estados Unidos, en San Diego y El Paso.

“Con esta expansión, Privarsa se convierte en la única compañía de nuestro ramo que tiene una cobertura completa a nivel nacional, desde Puebla-Veracruz hasta Tijuana, y pudiendo cubrir como empresa binacional las entregas ya sean en México o en Estados Unidos. Nos quedamos con todo el equipo de ventas, y el equipo de operaciones va a pasar a ser parte del equipos de Privarsa. Ahora, vamos a tener todo el soporte técnico de más almacenes y de más productos, para cubrir las necesidades de esa región”, comentó.

Esta cobertura ampliada abarca a las más de  50 marcas que comercializa Privarsa en el país, que van enfocadas a la inyección de plástico, componentes de moldes, purgas, resistencias, controles y todo lo que tiene que ver con fabricación de moldes. “En Privarsa nos consideramos prácticamente el supermercado de la industria de inyección de plástico. Lo único que no vendemos es materia prima y máquinas, pero todo lo demás: periférico y todo lo que va alrededor del molde lo tenemos”, aseguró

“Realmente vamos a ofrecer en la región noroeste del país  una variedad que no tenían. Antes dependían del mercado americano, y ahora van a tener lo mejor de dos mundos”, aseguró el Ing. Vargas.

Según el Ing. Pablo Vargas, entre los planes futuros de la empresa está la apertura de un centro técnico en Querétaro también, donde tendrán ahí máquinas de soldadura láser,  armado de portamoldes y servicios técnicos de controles de temperatura, entre otros.  Así mismo están duplicando en tamaño el almacén en Querétaro. “Estas son capacidades que ya tenemos en Monterrey, y ahora queremos llevarlas hacia la zona del centro del país, la zona del Bajío, que es una zona también muy importante”, aseguró.

“En plena crisis nos atrevemos a apostarle al crecimiento y al desarrollo del país. Estamos confiados de que el sector plástico va a salir muy fortalecido y hay grandes oportunidades. Creemos en la resiliencia no solamente del plástico sino sobre todo de los mexicanos, de nuestro ingenio y de nuestra forma de salir adelante”, puntualizó.

Con respecto a la coyuntura actual, el Ing. Pablo Vargas comenta que su empresa, al llevar casi  30 años, ha tenido que pasar varias crisis pasadas, en las cuales el plástico ha mostrado ser muy resiliente. “Es un gran producto que tiene aplicaciones en todas las industrias, en todas las áreas y punta de lanza en innovaciones. Mucho más ahora en la parte médica ha tenido gran importancia”, aseguró.