5 formas en que los plásticos ayudan a alimentar al mundo

Los plásticos hacen que los sistemas alimentarios sean más seguros, más asequibles y respetuosos con el medio ambiente.

Crédito: Getty Images.

Los sistemas alimentarios mundiales son cada vez más complejos, y una serie de problemas recientes, como la pandemia de COVID-19 y la creciente inestabilidad geopolítica, han complicado la forma en que los consumidores de todo el mundo tienen acceso a alimentos nutritivos.

En casi todas las etapas de los procesos de producción, transporte, venta minorista y consumo de alimentos, los plásticos promueven la seguridad y la facilidad de acceso de los productos alimenticios, al tiempo que disminuyen las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Conozca el análisis que hace PLASTICS sobre las formas en las que los plásticos ayudan a alimentar al mundo:

1. Los plásticos favorecen la seguridad alimentaria

Los plásticos son higiénicos y seguros, especialmente para aplicaciones que requieren contacto con alimentos. De hecho, los envases de plástico de grado alimentario pueden prevenir la contaminación cruzada y el crecimiento bacteriano al proteger los alimentos del entorno externo.

En última instancia, los envases de plástico facilitan que las personas de todo el mundo tengan acceso a alimentos frescos y pueden ayudar a disminuir las enfermedades relacionadas con los alimentos, especialmente en los países en desarrollo.

2. Los plásticos evitan el desperdicio de alimentos

En la cadena mundial de suministro de alimentos, los envases de plástico prolongan la vida útil de los alimentos para los consumidores. En los supermercados, los envases de plástico preservan la frescura de los alimentos, lo que reduce el desperdicio de alimentos al casi triplicar el tiempo que una fruta o verdura sigue siendo adecuada para el consumo.

Incluso en el hogar, los envases de plástico reducen el derrame y el desperdicio de alimentos ya que conservan los productos perecederos y garantizan que las familias hagan rendir su dinero al conservar los comestibles frescos durante períodos de tiempo más largos.

3. Los plásticos mejoran la accesibilidad y asequibilidad de los alimentos

Los envases de plástico para alimentos son más asequibles que las alternativas de vidrio o aluminio, lo que se traduce en ahorros de costos para los consumidores. Los envases de plástico para alimentos y agua son especialmente críticos para los consumidores que viven en áreas rurales y desiertos alimentarios.

Las poblaciones que viven en zonas rurales o remotas son más propensas a la inseguridad alimentaria porque el transporte de suministros de alimentos y agua puede ser costoso y requerir mucho tiempo. Gracias a estos envases, las poblaciones vulnerables pueden tener acceso a suministros de alimentos esenciales a un precio asequible.

4. Los plásticos ayudan a reducir las emisiones del sistema alimentario

Los envases de plástico para alimentos son más asequibles que las alternativas de vidrio o aluminio, lo que se traduce en ahorros de costos para los consumidores. Teniendo en cuenta que los alimentos promedio pueden llegar a recorrer miles de kilómetros desde la granja hasta el plato, un transporte eficiente y sostenible es un componente clave de los sistemas alimentarios modernos.

Los envases de plástico son más ligeros, más fáciles de transportar, su producción requiere menos energía y son menos propensos a romperse durante el transporte que otras alternativas como el vidrio y el aluminio. Y como los plásticos también son ligeros, producen menos emisiones que estos materiales alternativos. Los transportes más ligeros aumentan la eficiencia del combustible de los camiones y aviones que llevan productos a destinos lejanos.

De hecho, se utiliza hasta un 40 % menos de combustible para transportar bebidas envasadas en botellas de plástico en comparación con las botellas de vidrio.

5. Los plásticos son clave para la preparación de alimentos

Los plásticos son esenciales en muchos utensilios, herramientas y electrodomésticos de cocina, lo que permite un acceso fácil a herramientas críticas de preparación de alimentos a una amplia base de clientes. Los plásticos también se usan en la cocina porque no conducen electricidad y son resistentes al calor, lo que permite que el material proporcione seguridad en una variedad de aplicaciones de preparación y cocción.