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Químicos de Oxford, liderados por el científico Peter Edwards, desarrollaron un método para convertir los desechos plásticos en gas hidrógeno.

Este nuevo proceso rompe el plástico en pequeños fragmentos y lo mezcla con un catalizador de óxido de hierro y óxido de aluminio, para explotarlo luego en un generador de microondas a 1.000 vatios y crear zonas calientes en el plástico antes de desprender el hidrógeno, recuperando en cuestión de segundos el 97 por ciento del gas presente en el material. El hidrógeno obtenido puede ser utilizado como un combustible limpio y los subproductos como carbono sólido.

Los hallazgos fueron publicados en la revista Nature Catalysis, y detallan cómo los investigadores mezclaron partículas de plástico pulverizadas mecánicamente con un catalizador susceptor de microondas de óxido de hierro y óxido de aluminio. La mezcla se sometió a un tratamiento con microondas y produjo un gran volumen de gas hidrógeno y un residuo de materiales carbonosos, la mayor parte de los cuales se identificaron como nanotubos de carbono.

Gráfico del estudio publicado en Nature Catalysis y que se titula “Microwave-initiated catalytic deconstruction of plastic waste into hydrogen and high-value carbons”.

Gráfico del estudio publicado en Nature Catalysis y que se titula “Microwave-initiated catalytic deconstruction of plastic waste into hydrogen and high-value carbons”.

Este rápido proceso, de un solo paso, tarda de 30 a 60 segundos para convertir plástico en hidrógeno y carbono sólido, y simplifica significativamente los procesos habituales de tratamiento de residuos plásticos. Además, demostró que más del 97 % del hidrógeno del plástico se puede extraer en muy poco tiempo, en un método de bajo costo sin carga de CO2.

De acuerdo con el sitio web de FuelCellsWorks, Peter Edwards, director del proyecto, afirmó que el estudio abre un área completamente nueva para la catálisis, en términos de selectividad, y ofrece una ruta potencial para combatir el exceso de los residuos plásticos, “particularmente en países en vías de desarrollo, donde puede actuar como una ruta hacia la economía del hidrógeno, y permitir la superación del uso exclusivo de los combustibles fósiles”.

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